Informaciones claves

La inseguridad alimentaria y las carencias nutricionales continúan siendo un problema crónico a nivel mundial. Casi la mitad de las muertes (45 por ciento) entre niños menores de cinco años alrededor del mundo están relacionadas con la desnutrición (emaciación, retraso en el crecimiento, insuficiencia ponderal).
La sequía es una de las causas más comunes de la escasez de alimentos. Otros factores subyacentes son los conflictos, la pobreza, las inundaciones y la falta de infraestructuras agrícolas. El riesgo de sequía ha aumentado por causa de la degradación ambiental y el cambio climático.
Uno de los principales problemas de la inseguridad alimentaria es la ingesta deficiente de nutrientes que tiene como resultado la malnutrición. La infancia y las personas adultas con malnutrición están en mayor riesgo de sufrir formas graves de enfermedades y tienen tasas más altas de morbilidad y mortalidad.
A diferencia de los desastres que suceden de forma repentina, la inseguridad alimentaria se desarrolla lenta y gradualmente. La respuesta a la inseguridad alimentaria abarca intervenciones específicas para la nutrición destinadas a prevenir o tratar la malnutrición aguda, así como acciones para abordar las sequías.

Principales efectos sobre la salud

Problema de salud	Factores de riesgo
Malnutrición y deficiencia de micronutrientes	Deficiencia nutricional, aumento de la susceptibilidad de contraer enfermedades, morbilidad y mortalidad. Entre los grupos más vulnerables están los niños menores de cinco años, las mujeres embarazadas y lactantes, los adultos mayores, y las personas que viven con condiciones de salud crónicas como VIH/SIDA y tuberculosis.
Enfermedades diarreicas	El acceso limitado al suministro de agua potable, la higiene y los servicios de saneamiento puede desencadenar enfermedades diarreicas.
Infecciones respiratorias y cutáneas	Los grandes desplazamientos de población provocados por sequías, sumados a las condiciones de hacinamiento y prácticas de higiene deficientes en los refugios de emergencia pueden ocasionar infecciones respiratorias y/o cutáneas.