Informaciones claves

Un deslizamiento de tierras es el movimiento masivo de rocas, escombros, tierra o lodo ladera abajo. Puede deberse a lluvias, terremotos, sequías, erupciones volcánicas o erosión. Los flujos de escombros también se conocen como aludes de lodo.
Se prevé que el cambio climático y el aumento de las temperaturas provoquen más deslizamientos de tierra, sobre todo en las zonas montañosas frías, ya que el deshielo de la nieve y el hielo hace más inestables las laderas rocosas.
En los días, semanas (y a veces meses) siguientes a un deslizamiento de tierras, las principales preocupaciones sanitarias son las enfermedades diarreicas, las transmitidas por vectores y las infecciones respiratorias y cutáneas.

Principales efectos sobre la salud

Preocupaciones sanitarias	Factores de riesgo
Traumatismos (lesiones) y elevada mortalidad por lesiones	El agua y los escombros que fluyen rápidamente pueden causar una elevada mortalidad y lesiones. La causa más común de muerte en un deslizamiento de tierras es el traumatismo o la asfixia por atrapamiento. La rotura de tuberías de electricidad o gas también puede provocar lesiones como electrocución y quemaduras.
Transmisión de enfermedades infecciosas: enfermedades transmitidas por vectores, alimentos y agua	La rotura de tuberías de agua o alcantarillado a causa de un corrimiento de tierras puede afectar a la calidad y cantidad del suministro de agua y, por tanto, contribuir a un aumento de las enfermedades diarreicas. Tras un deslizamiento de tierras, el abastecimiento de agua, el saneamiento y la eliminación de residuos pueden verse interrumpidos, lo que da lugar a peores condiciones higiénicas. Esto puede aumentar la presencia de mosquitos y, por tanto, un aumento de enfermedades como la malaria. La proliferación de vectores como las moscas podría contribuir a aumentar la transmisión de enfermedades alimentarias. El desplazamiento de personas tras un deslizamiento de tierras puede interrumpir el acceso al agua potable o a las letrinas, lo que aumenta el riesgo de enfermedades transmitidas por el agua y los alimentos.
Efectos sobre la salud mental a corto y largo plazo	Los deslizamientos de tierras pueden tener un gran impacto psicosocial y en la salud mental, especialmente para las personas directamente afectadas.
Inseguridad alimentaria aguda y malnutrición aguda	Los deslizamientos de tierras pueden tener un efecto devastador en los medios de subsistencia de los agricultores al impedirles el acceso a la tierra durante años. Pueden provocar la pérdida de reservas de semillas y alimentos y ocasionar la pérdida de ganado y cultivos, lo que puede aumentar el riesgo de malnutrición en la comunidad afectada.