34. Lavarse las manos con jabón
Descripción general
Lavarse las manos es una de las formas más importantes de prevenir la propagación de varias epidemias, especialmente las enfermedades diarreicas. Lavarse las manos es fácil y todos (incluidos los niños) puede y debe hacerlo. Para lavarse las manos hay que tener acceso a agua y jabón.
Las manos deben lavarse con jabón:
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ANTES:
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Preparar la comida
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Comer
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Alimentar a un niño
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Amamantar
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Cuidar a un enfermo o curar una herida (propia o ajena)
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DESPUÉS:
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Ir al baño
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Hombres, niños, mujeres y niñas deben lavarse las manos después de ir al baño
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Las mujeres y las niñas deben mantener la higiene menstrual durante sus ciclos menstruales cada mes.
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Promover el uso de materiales limpios y secos (desechables o reutilizables).
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Promover el cambio de materiales menstruales y el baño tan a menudo como sea necesario.
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Desaconsejar compartir las compresas reutilizables con otras personas
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Limpiar a un bebé
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Tocar basura o desechos
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Tocar o dar de comer a animales; manipular carne cruda
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Sonarse la nariz, toser o estornudar
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Tratar heridas o atender a personas enfermas
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Entrar en contacto con una persona enferma en una epidemia (ver la herramienta de acción Lavado de manos en una epidemia altamente infecciosa).
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Qué hacer y cómo hacerlo
Cómo lavarse las manos
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Mojar las manos y frótalas con jabón.
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Frotar todas las partes de las manos durante 10 o 15 segundos.
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Hacer mucha fuerza (empujar las manos con fuerza) y recordar lavar todas las superficies, incluido el dorso de las manos y entre los dedos.
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Aclarar bien las manos para que no tengan jabón.
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Secar las manos con una toalla de papel. Si no hay toalla, agítalas en el aire hasta que se sequen.